Una escritora que sueña con publicar

Lisa Navas cuenta esta historia por el Diario de Cuyo, en San Juan, Argentina. La voz le tiembla porque sus pulmones no tienen la suficiente fuerza, tiene dificultad para usar su mano derecha y desde hace más de 10 años pasa sus días en silla de rueda. Sin embargo, todos los días da batalla a su enfermedad. Ella es Carina Arena, una pocitana de 42 años que sufre Distrofia Muscular, un mal hereditario que produce debilidad de los músculos. La mujer, que es casada, comenzó a escribir cuentos infantiles para poder superar el dolor y ahora sueña con publicar su primer libro.
Cuando tenía 15 años Carina notó que algo sucedía en su cuerpo. Tiempo después le diagnosticaron la enfermedad. Con el paso de los años la distrofia fue dañando sus extremidades. En 2003, cuando las piernas dejaron de funcionarle y pasó a vivir sentada en una silla de ruedas, la tristeza y el dolor se adueñaron de ella. ‘Sentía que ya no tenía sentido nada. Estaba muy triste y lo único que hacía era llorar. Un médico me dijo que buscara algo que me hiciera feliz para poder seguir viviendo‘, contó Carina que trabaja todas las tardes con su esposo en taller de reparación de electrodomésticos. Fue ahí que encontró en la escritura el camino a la felicidad.
Empezó a participar de talleres literarios y los cuentos infantiles se volvieron su fuente de energía. ‘Comencé escribiendo narraciones, poesías y poemas, pero en la literatura infantil encontré lo más lindo. Escribir para niños es un placer, uno los lleva a un mundo imaginario que los hace felices‘, dijo y contó que sus sobrinitos son los primeros en evaluar sus cuentos. Es que no tiene hijos por su enfermedad.
‘Había un 99% de posibilidades que mis hijos nacieran con lo mismo que yo. Fue una elección de vida‘, dijo y contó que ella se mantiene haciendo rehabilitación 3 veces por semana, pues los médicos le dijeron que caso contrario quedará postrada en una cama. ‘Cuando fui al médico la ultima vez me dijo que no se explicaba cómo seguía viva. Esta enfermedad mata a la gente muy joven, es difícil que lleguen a los 30 años‘, agregó.
Desde que comenzó con la escritura Carina se propuso volver a vivir alegre. Es por eso, que ahora sueña con poder publicar una colección con algunos de sus cuentos para niños. Ya tiene escrito, en borradores, 72 cuentos. Grillos que hablan, libros sin hojas y ratones que hacen joyas con los dientes de los niños, son algunos de los personajes que Carina sueña con acercar a los chicos. ‘La idea es hacer una colección con 12 cuentos. Ya los tengo seleccionados y los han corregido varios profesores de literatura. No me gustan las cosas mal hechas‘, dijo la pocitana que ejercita todos los días su mano derecha para poder seguir escribiendo en la computadora.
‘Este año me presenté para el concurso de la Legislatura y salí tercera. En ese momento pensé que lo que escribía podía servirle a otras personas y se me ocurrió hacer un libro. Tengo un amigo dibujante que me ayuda con las ilustraciones de los cuentos y un diseñador que está haciendo todo el trabajo de armado‘, contó y dijo que aproximadamente necesita 50.000 pesos para las impresiones de 300 ejemplares.