Cuento. Un regalo de Reyes
a noche de reyes, Nico puso las zapatillas con la esperanza de encontrar un robot a la mañana siguiente. Sin el pastito que juntó para los camellos y el agua a medio tomar, Nico encontró un paquetito de regalo arriba de las zapas. Nico lo abrió desesperado, luchando con el envoltorio, para descubrir que no había ni rastros del robot.
Los reyes le habían traído una camiseta azul con el dibujo de un sapo verde con una capa roja. Medio que no le gustó mucho la sorpresa y la mamá le pedía que se la pruebe y se ponga contento porque era un lindo regalo. Nico se puso la remera y se fue a tomar la leche a la cocina. Después de jugar durante todo el día se fue a dormir agotado.
Con la habitación a media luz, su mamá le contó una historia de un caballero que tuvo que luchar a trompadas con tres dragones para salvar a un pueblo oprimido. Al otro día, cuando se despiertó buscó la camiseta azul y descubrió que la camiseta estaba pero el sapo no.
-¿Se habrá ofendido, porque yo quería un robot de regalo?- se preguntó Nicolás
Y se puso algo triste porque el sapo se había ido sin dejar siquiera una nota. Fue a lavarse los dientes al baño y en la ventanita escucha unos golpecitos. Nico se asoma y estaba el sapo con una espadita en la mano.
Sorprendido le pregunta que hace ahí afuera y lo invita a pasar. El sapo le cuenta que estaba escondido en la remera para pasar desapercibido, pero que tenía una misión que cumplir y había salido a ver si encontraba a un hechicero que vivía en el barrio y se hacía pasar por verdulero.
El chico escuchó toda la historia y no podía creerlo, le propuso ayudarlo a encontrar al verdulero hechicero pero el sapo le explicó que era una tarea peligrosa que solo podían realizar los sapos vengadores y que por el momento lo ayudaría con dejarlo estar en su camiseta para que nadie se de cuenta.
Orgulloso, Nico lo invitó a pegarse a su camiseta y lo ayudó en esa y otras aventuras en las que se divirtieron hasta que el sapo vengador debió ir a otra misión, esta vez en Japón.
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Un regalo de Reyes
Este cuento infantil fue escrito por Germán Alvarez de Argentina () a los 30 años de edad. El mismo fué ilustrado por Fátima Maida de Argentina () y narrado por Fátima Maida, también de Argentina ()
Contamos con una narración de este cuento, te invitamos a escuchar nuestra versión de Un regalo de Reyes, en la voz de Fátima Maida de Argentina (), que ya fue reproducido anteriormente 1,293 veces.
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